Paul Éluard. El espejo de un momento

 

Presentamos tres textos del reconocido poeta francés en la versión al español de Aldo Pellegrini.
 

 

Paul Éluard

 

La aventura pende del cuello de su rival…

La aventura pende del cuello de su rival
El amor cuya mirada se encuentra o se extravía
En los espacios de los ojos desiertos o poblados.

Todas las aventuras del rostro humano
Gritos sin eco signos de tiempos muertos que nadie recuerda
Tantos rostros hermosos tan hermosos
Ocultos por las lágrimas
Tantos ojos tan seguros de sus noches
Como amantes que mueren juntos
Tantos besos al abrigo de la roca y tanta agua sin nubes
Apariciones surgidas de ausencias eternas
Todo era digno de ser amado
Los tesoros son paredes con sombra ciega
Y el amor está en el mundo para olvidar al mundo.

 

 

Al alba te amo

Al alba te amo tengo toda la noche en las venas
Toda la noche te he contemplado
Tengo que adivinarlo todo me siento seguro en las tinieblas
Ellas me conceden el poder
De envolverte
De sacudirte deseo de vivir
En el seno de mi inmovilidad
El poder de revelarte
De liberarte de perderte
Llama invisible de día.

Si te vas la puerta se abre hacia el día
Si te vas la puerta se abre hacia mí mismo.

 

 

El espejo de un momento

Disipa el día,
Muestra a los hombres las imágenes desligadas de la apariencia,
Quita a los hombres la posibilidad de distraerse,
Es duro como la piedra,
La piedra informe,
La piedra del movimiento y de la vista,
Y tiene tal resplandor que todas las armaduras y todas las máscaras
quedan falseadas.
Lo que la mano ha tomado ni siquiera se digna tomar la forma
de la mano,
Lo que ha sido comprendido ya no existe,
El pájaro se ha confundido con el viento,
El cielo con su verdad,
El hombre con su realidad.