Maurizio Casagrande

Una lengua que nadie te enseña

 

 

 

(Versiones al español de Stefano Strazzabosco)

 

 

 

 

Cada poema verdadero es como

la semilla más mínima

lo dices lo dejas caer se cae

sin siquiera una flor

allá donde nunca pegaría

y cuando ya no quedan ni cenizas

de ti llega el día en que se muestra

con toda la potencia

que tiene

 

aunque es sólo

una semilla en brote

 

 

*

 

 

Una lengua que nadie te enseña

 

Si atardece debajo

del resplandor de Diana

echa a volar por todo

el campo la manada

que es mi compañera

cuando me quedo solo

 

son montones de sombras

bajando a los posaderos

alrededor de mí, un hormigueo

de huesos que no murmuran ningún

idioma sino sólo aquello

que a todos nos toca de muertos

 

en silencio platican entre ellas

y conmigo con mi corazón

sin siquiera que sepa

qué se dicen y siento

pena un momento

y no le tengo miedo a mi gente

 

de casa de los viejos hace mucho

partidos y de los creyentes equis

el miedo está dentro

de mis cromosomas

que se extraviaron cuando

echaron raíces en este valle

 

 

*

 

 

No ha habido hasta hoy licenciados

ni nadie de acá sabe hablar

la lengua que no conocemos

y sin embargo usamos

con nuestros muertos lengua de millares

de años más universal

que todas las de hoy

y también de los siglos pasados

no se estudia en las universidades

no se aprende escuchándola

no es dura ni dulce

sino cortante como hoz

ardiente como brasas

quemándote los labios

dejando en esa carne

el sello de una llamarada

huevo de cuco

sembrado en nuestros nidos

para ahogar

a cualquier otro pajarito

 

 

*

 

 

Cada día en las casas demasiado oscuras
los muertos siguen muriéndose
en las fotos guardadas en los cajones
S. Zanotto, A sera, de Basso Orizzonte, 1959

 

Yo ando meditando en esta tarde

acerca del destino de los muertos

de morirse dos veces sepultados

bajo el vidrio de un marco

todos iguales ya, los blancos

y los negros, al igual

que nuestros huesos en los camposantos

 

y en tanto espero yo también partir

por ese viaje sin retorno sea

de noche o de día por rutas

no señaladas sin alguna

indicación con el boleto en mano

pagado ya y sin necesidad

de validarlo siquiera

 

 

*

 

 

Me despojo de todo

escupo incluso el alma toda entera

hermosa

en guerra contra todos

incluyéndome a mí

al basurero echo mi plumín

de ganso echo el tintero

digo un par de blasfemias

escarbo con las uñas de los dedos

 

soy bueno sólo cuando

me acerco con pureza a la

sabiduría del asno

llegando a las entrañas del dialecto

 

 

*

 

 

Mi lengua

al igual que toda lengua de poesía

es lengua de locura

palabras que no sirven

para el juego encantado de un niño

que descubre qué hay

alrededor de él

al que le importa quien nace

y quien muere

palabras sin engaño

de un ángel condenado

que cayó de su nido

en este estercolero

palabras que abren de par en par las ventanas

dejando ver un mundo

que no parece tan

redondo

 

 

*

 

 

Poesía se hace cuando

lo que es grito y es llanto

se convierte en un canto

 

Maurizio Casagrande (Pádua, Italia, 1962). Es profesor, crítico, poeta. Ha publicado las entrevistas a poetas de In un gorgo di fedeltà (2006), las ... LEER MÁS DEL AUTOR