Vuela el sueño como los pájaros
(Traducción al español de Kalid Al Raisoni)
1 / La rosa
La rosa es nieve derritiéndose desde la cima de una montaña.
Resolviéndose de una crisis hipóxica y de la hipotensión.
En respuesta a la represión, abre sus brazos para soltarse
y asimilar la fotosíntesis y las picaduras de las abejas.
La rosa no lo reconoce en absoluto
Entonces ejercita la contradicción dos veces
cuando se marchita y su tallo en su máximo verdor
Y cuando está sin olor y levanta la voz de su color.
La rosa no obedece a la lógica
Ayer vi rosas amarillas cerrando
sus pétalos al disminuirse la luz en el ocaso
y las rosas púrpuras de mi abuela en su jardín que algún día
cuyos labios se abrían solamente de noche.
Nadie se atreve a acusar a la rosa de desvergüenza
ni si quiera de un hilo mínimo
La rosa practica sexo cuando se reúne la muchedumbre en plazas públicas
y en las fiestas y los carnavales
El polen de la flor masculina se adhiere al estigma de la flor femenina
aunque todos los ojos y las cámaras tridimensionales y cuadridimensionales
pueden seguir esto con su más mínimo detalle en el aire.
La rosa es un jardín trasero para los escaparates de la civilización o la dependencia y la nacionalización
Puede utilizarse como enormes coronas
Como ritual burgués en el que se reúnen las delegaciones y las nobles y familias
Además, una sola rosa al borde de una carretera
sirve al propósito para aquellos que se encuentran en el umbral de la pobreza.
Aunque pagarán el precio para mantener la tesorería del estado
y proteger la economía del colapso y la devaluación de la moneda
Mientras sus crisis, necesidades y sueños se amontonan en la humedad sacrificándose por sus patrias.
La rosa no reconoce la paranoia
ni la fobia a las alturas y a los lugares oscuros
Ni una esquizofrenia entre los contrarios o entre las teorías y la realidad
Se adapta rápidamente y crece, sea lo que sea
manteniendo la calidad del aroma y del color.
La rosa no sufre del complejo de Edipo
Y está a la misma distancia de todos
Ella no tiene premeditación ni predestinación para matar, ni para algo más
Y siempre sostiene un equilibrio que asegura su efectividad e integridad.
La rosa no está sujeta a discriminación racial.
No reconoce identidades
No mide con doble rasero
El olor y el color de la rosa llegan en el mismo momento
con plenitud e igualdad
para los blancos y los negros, para los pacíficos y los violentos
a pesar de la alta frecuencia de las multitudes.
La rosa es la fase de larva en el apiñamiento de la música.
Ella se rebela contra sí misma en una fuerte sublevación
se despega de los enfoques de la codificación y procrea el aroma o el espíritu.
En la cumbre, fluye el color de su profundidad y se hunde en él.
¡Y sube el olor en la escala de la satisfacción y la eternidad!
2 / Vomito
Ahora estoy vomitando
¡Sí, vomito!
Maldigo los genes que me clasificaron en el redil humano
y me tienen prestada a este polvillo.
Ojalá fuera un gato sarnoso o un gato persa
O un perro rabioso o adiestrado
No importa
Ojalá fuera un pajarito
O una mosca cargada de microbios de los vertederos
Tengo dos alas
para irme tan lejos y arrancar mi alma
de esta apestosa guarida sectaria humana.
Oh…
Quisiera una salida
Me ahogo y floto en las náuseas
¡Espesa espuma me asfixia y no la puedo derribar!
3 / La muerte de un poeta
He oído que un poeta más cerca posado en el cráter de la muerte
no lo conozco
pero el chirrido que golpeó mis oídos
presagiaba el vacío que me rodeaba
Quizás porque los tentáculos de la muerte que en todas las direcciones surgen en mi mente
son implacables
empaquetando gratis, niños, adolescentes y hermosas chicas
y pobres, vendedores con carritos, ancianos, amantes y homosexuales
y los arroja en los vertederos de cráneos, lápidas y esqueletos,
cortando de las banderas de la rendición perversos sudarios y ataúdes.
Un poeta muere
esto significa que la esquina del camino se vuelve más curva
significa que las tonterías brotan del vientre de la indiferencia,
y en la calle trasera, se amontonan más baches y basuras
se pliegan los pinos y los robles
y el verdugo aumenta las guillotinas listas para de las masacres.
Después de que el poeta muere caerá el muro
encima del que duerme la pérgola de jazmín
marchitarán las flores de naranjo y llorarán con arrullo las tórtolas
El mar desembocará en el río
La viña engendrará pasas y no brindará vino
y la chica despertará del sueño del amor.
El poeta rebosa del abundante amor que desborda la necesidad de la vida
Ella no lo soporta tanto y se mutila
Cuando ya está en el ataúd
se filtrará en el ojo del sol
después de ocultarse de la vista de la muerte
Y que la muerte se esconda de la mismísima muerte
que recoge su luz en bolas rodándolas por el suelo
para que otros bailen como mariposas en su camino hacia la muerte.
4 / Amo mi rostro
Amo mi rostro que me devuelve a mi primera andadura
y prepara las trampas a mis tropezones y mi ignorancia
Mi rostro que tartamudea el lenguaje
Desanima los diccionarios y viola los alfabetos y los cruces
Cuelga los viajes de las narices y amenaza tanto la paz civil como la tensión.
Me gusta su ingenuidad que me hereda la indiferencia
Incluso con pompas de jabón y manchas de aceite
probablemente no sería malicioso
pero estará implacablemente entregado recogiendo el barro y luego esparciéndolo
como si fueran pétalos preparándose al carnaval
sin preocuparse de que puedan quedarse cerca de algún zapato
Mi rostro que patea las distancias y las formas geométricas
Ara para la rosa un lecho no poco reclinado
y me separa de los puntos y de los viajes
Contigo intercambia los rasgos, la fatiga y los cantos
y comparte la sal y aullido mientras soltamos la espuma, los pájaros y los deseos.
5 / No somos parecidos este mundo
No somos parecidos este mundo
El vehículo blindado que nos acecha nos limpia antes de desnudarnos
Esta quietud no significa mucho ya que cegamos el ojo del mundo con una aguja
El mundo que salta como un payaso gracioso
es el mismo que apunta a sus cabezas nucleares y al napalm para matar
mientras el oportunismo salta en sus entrañas sin dudarse ni vacilar.
¿Qué pasaría si reemplazáramos nuestras mitades en un intento de resistir?
y dijimos que la florecida parte es la mitad de la sociedad
Con un pincel de pintar paredes, pintamos nuestras mitades superiores de verde como apoyo
a los ambientalistas
y reemplazo mi pierna con una farola, para experimentar el sufrimiento de los desengañados.
mientras tu pierna se convierte en un martillo en la mano de un tornero aprendiz
¿Qué pasaría si dijéramos: “Nada fuera del texto”
¡Nada en él es así!
El huevo sigue siendo un huevo
y los poetas son locos comisionistas entre la realidad y el arte
¿Acaso te presto ahora mi sostén como cuestión de igualdad
y tomo una foto con tu pipa como anhelo injustificado de un ritual burgués?
Y entre “Trotsky” y “Lenin” podemos invertir la dirección de las hoces hacia arriba y untarlas del azul.
en un trabajo surrealista para derribar el cielo hacia abajo
y explorar la metafísica de los próximos veinte años
ordenando estrategias para enfrentar las guerras, las huelgas obreras y la gripe de los osos
y organizando carnavales de socorro y las elecciones y atraer los inversores de la Meseta del Tíbet.
Cuando sonó tu teléfono móvil mientras estabas degollando las dos palomas blancas
no quise detener tus palmas de teñirse
solamente quise decir:
No son sólo los opuestos que dejan el mundo sin dormir
También tú y yo…
Aunque somos parecidos como las dos cuchillas de unas tijeras.
6 / Vuela el sueño como los pájaros
Vuela el sueño como los pájaros
Lo persigo apresurado
para barrerles el camino
Y me coge entre sus costados
como si fuera su hija.
Papá, mantenme contigo, que no quiero volver
que la mudanza es agotadora
y mis ojos están abiertos desde hace mucho tiempo
pero solo veo mi sombra
que nunca deja de alcanzarme.
átame a un árbol perenne
que los caminantes contemplan
no me van a ver y yo los veré
Este es mi pie que voló
y mi caligrafía que se fue
Y mi paciencia se desvaneció
Y los escombros de mi casa
Y una nana que todavía recuerdo.
Volveremos algún día
entonces no me compadezcas ni hoy ni mañana
Te amo porque eres anciano y yo nueva
porque eres mucho y yo poca
porque abundas de sueños.
7 / Balcón y casa en Casablanca
Mientras me miraba al horizonte, se me cayó la garganta
Si el amor abriera ampliamente su puerta
yo no seguiría abriendo las ventanas todas las noches, aguardando
Me miraba en los detalles de los edificios
en el polvo leve que se nubla silenciosamente
para que nadie le preste atención, con el pretexto de recuperar el esplendor.
En su quietud rumorosa y su portavoz dice que me pego para esconderme o quedarme
Resisto a la multitud, a la llamada de los vendedores ambulantes y a un beso dejado en la acera
A la nube que cuelga detrás de mí le contaré mis derrotas así como mis infinitas victorias
Confiaré a los pequeños balcones a lo largo de la calle llevar mis pesadas maletas
Vacié mis bolsillos para ser tan leve cuando me apegado a ti
No esperaré a los transeúntes no por tenerles miedo
pero tragué el aire de la casa cálida y el olor de su antigua memoria
Tal vez el amor se volvió hacia mí en aquel momento y abrió sus ventanas
Entonces mis dedos vacilaron en surgir
El bocado en mi garganta se quedó colgado entre dos ausencias
Me extendí para que los transeúntes no piensen que tenía el ala rota
Me llamó tu serpenteante marcha en mis axilas
La rosa que acaba de esparcirse en mi boca
Tu nombre, que desde cuarenta años me provoca el mismo escalofrío al escucharlo…
8/ Los que regresan de la guerra
Los que regresan de la guerra se liberan de la sombra y de los olores
No les basta un tronco que se levanta al filo de la noche
Ni la miel goteando de una rosa que se pierde en la multitud
Los paraísos se divierten en los límites de un tanque cuando nos sublevamos, y no había otro camino,
así bebimos nuestra dos aguas.
No se dio cuenta el camellero cuando devolvimos las partes del “rompecabezas” de barro por fuerza
en cada momento
¿Acaso tenía amputado el brazo, entonces las palomas sorprendieron nuestras piedras en descuido
de las condecoraciones?
y nos olvidamos, con nuestra burla, de apretar las mantas de la ciudad y cargar las balas en el oído
de la ausencia.
Los que regresan de la guerra no se cortan el pelo rápidamente
Les sorprende el silbido de las contusiones y vuelan ligeros en el valle de las mariposas
Chocan contra el techo del borrar y de la hojalata
¿Por qué todavía tenemos el cerebro de los rinocerontes y los “guardaespaldas”?
Tallamos todas estas rocas para cerrar las puertas
dice el Antiguo Testamento
La Brigada del anhelo asalta las sabanas y los pantanos, deambula por emboscadas y las barreras
de hormigón.
Este horror que se mezcla sobre el asfalto será un cinturón en medio de la plaza
(al compás de la una y media) mientras gritaban
No hay regreso de la guerra sin derrotas ni cargas.
No hay regreso de la guerra sin deseos ni fetos
En el seno del valle se extiende un poema “que disfrutes el sol”
Quizás los que regresaron de la guerra deambulan con los buches de las aves
La tristeza ya no basta para sostener las calderas
y la ausencia se quedó colgada en un minarete que sufre bajo el peso del humo
testificando que no hay olor sin barro o cerveza.
9/ Como dos montículos en el lomo del Mundo
Los poemas nos derrotaron, amado mío, cuando éramos ligeros como una plaza a cuyos pliegues
no fluyen
Hay algunas contusiones que abren de nuevo la herida de nuestra derrota, y una zapapico
de la multitud que señala al fuego.
El crepúsculo allí hace señales y lo veo
en el cuartel lamiéndonos las piernas y no nos importa.
Lejano eres, mi amor, como una estrella, cercano como un trozo de un azúcar
Las rimas te restauran como un océano lejano y te atraen las flechas como una gaviota
Te confunde nuestro acercamiento como palos que golpean impetuosamente contra las revueltas
de los trabajadores y los campesinos.
Mientras el “Cántico de la alegría” te hace cosquillas como un bebé
El arco del violín de “Abdo Dagher” divide tus glóbulos rojos que hierven como frutos rojos
¿Desde cuándo te encuentras contigo mismo extraviado si los sombreros y las coronas
No se hubieran convertido en perlas y en gargantas esbeltas con himnos que relinchan en tu sangre.
Temblamos como dos montículos en el lomo del Mundo
Nuestras madres no nos prepararon temprano para la guerra, ni para hacer el pan y restaurar el cristal
Nos llevaban al agua del río para oler las crías de las libélulas y los peces.
y para enfrentar el rostro del mundo sin retoques, y barrer las caras, la noche y los estantes de ladrillo,
movilizar la fragilidad hasta ciertos plazos del tiempo mientras las caravanas se abarrotan
de los campos y de los salmos
y hemos aquí huérfanos en el fondo del manantial, masticando el placer y la pregunta.
¿Por qué hemos soportado tanto quebramiento mientras nos rascábamos nuestras mejillas
como los polluelos de paloma marchitándose, y tanteando su suerte en los intentos de volar?
Nuestras piernas hundidas en las nubes devuelven la confusión de cruzar el agua hacia arriba
dividen los diccionarios en copas de uva para medir el delito perpetrado en la lengua
o distribuyen la lujuria en las cortinas del límite que no viene ni se rebela.
Regresamos con sandalias de nubes, dos borracheras y jaulas de frutos rojos a cuestas
Esta plata brilla en un chal que espera la resurrección de la metáfora
en una caravana que extiende el susurro hacia el norte y no espera a los camelleros
y alberga el delta en los bolsillos de los supervivientes del asedio de los campamentos y los cantones.
La cueva se derrumbó sobre un espectro que abrió su pecho al naufragio
mientras las olas indiferentes a las abubillas y el muelle
El libro soporta los testimonios
Le basta con la taza del aroma y el apagón de una vela en el tiesto del miedo
Las cestas preparan sus intenciones al molino y los frutos los daña la seriedad
La locura corona sus trenzas con los fastidios
¡Los espejos pulen sus palmas para la labranza y desmontan lo constante y lo mudable a la espera
de una alondra!
No te preocupes por mis manos hendidas
La fragmentación después de la derrota es una victoria
¿Quién dijo que el cañón del tanque no se enciende con las canciones?
Los blindados de orugas aquí están latiendo con ritmo fervoroso mientras yo reforzaba el polvo
en el regazo de mi decepción.
Los pasteles fracasaron en celebrar la fiesta del Aid
¡Déjame contar las espinas apretando las cuerdas de quedarme en la soledad
perforar la caña para volver a los cantos y los deseos y a criar de nuevo los conejos!
10/ Punto del Mundo
Dejaré de lado todas las apuestas
y me someto a que los republicanos tienen el asalto de las palomas
Ahí está un hombre y una mujer, cada uno sentado en ambos extremos del Mundo
y sus piernas suspendidas con soltura y locura
Los halcones no han de desarraigar la indocilidad de los amantes
Quizás porque ambos renunciaron a la última pieza de su ropa interior
El juego de morderse los dedos presagia del naufragio
vuelven inmediatamente a la carga y no le dan ninguna oportunidad de adivinar a la lectora
de la taza de café
Un beso vuela de este a oeste
y el mundo se pliega, el cielo cae en sus respectivos regazos y vuela el ajedrez
La adivina dice que ninguno de nosotros vivirá mucho
Se ahogará en el mar de Mishima después de sufrir maltrato de los delfines
Mi madre tuvo que contar a sus gemidos y cerner su pasión juvenil, para que no se arrastrare
al manantial.
La guillotina no reúne a los dos dispersos, pero no los separará
debajo del artículo de los picos rojos y las insignias de los indios
Y el “Cascanueces” y “Notre-Dame de las Rosas”.
Y “El amor sobre la meseta de la pirámide”, antes de cortarse la nariz.
El monje Zen pasó por aquí cuando una hormiga se dirigió hacia si misma
Cada uno de nosotros se apoya más en la roca del Mundo, la aleja, luego lo aplauden
mientras estaba inmerso en “Prolegómenos de Ibn Jaldún”, recuerda las ciudades utópicas
por las que pasó
Y mientras nuestras piernas se balanceaban, enrollé mi falda hasta mis muslos
¿Qué he de hacer ahora para experimentar la traición y dije con arrogancia:
Tengo un muslo muy suave más hermoso que un poema en prosa que se deslizó entre tus dedos
cuando suspiraste para estar a salvo del zumbido del bombardeo y recuperaste tus rasgos sin espejo.
No todas las bombas están perplejas o tienen caducidad
Una de ellas está se oculta lejos de la ley de la gravedad.
confirmando a Newton su absoluto fracaso para atraer a un hombre y una mujer
Ninguno de los dos tiene las dos mitades juntas dentro de sí mismo
mientras vacila, lo muerde el amor, la física y el síndrome de la caída en un sueño.
Los aristotélicos pueden decir
Este Mundo no será completamente apropiado mientras las leyes de la naturaleza se lanzan sobre la tierra
y mientras permanezca con un solo zapato
Pero un hombre y una mujer suspendidos del techo del Mundo con suciedad y pasión
Dignos de volcar los polos, cultivar la intuición,
definir nuevas coordenadas que acorten las distancias,
resolver los bloques de guerras frías y calientes,
disipar la desengaño de las tragaluces abiertas ampliamente
y plegar el Mundo en algún punto!
11/ Collage
Voy a preparar nuestro café con plumas de los cuervos para que esté lo suficientemente negra
como para oscurecer la habitación
Podemos manchar nuestros cuerpos tan implacablemente hasta no querer ningún rescate.
O la tomo como un conjuro para que no llegue el día
Lo experimentaré como pintalabios que estampo sobre tus labios
Luego guardaremos bastantes copias de nuestros labios encima del espejo
Dibujaré un árbol en la pared que está enfrente de la ventana
y con la yema de mis dedos tiraré sus ramas para divertirnos y balancearnos juntos
Y si debe dar fruto, me esconderé en tu pecho como un feto que deletrea el alfabeto
Después de veinte años, tomaré una parte de cada oficio e insistiré en ofrecerlos para ti
para que me invites y yo apresuro mi marcha a buscarte
La fermentaré con pasas, para que quede delicioso para los alientos de tu piedra.
cuando te diriges con palabras hacia los ángeles para que extiendan sus alas en el techo y duerman
entre tanto establecemos nuestra sombra con un rito mawlawi agradable
No será de extrañar convertirlo en color de mi pelo
y evitar sus mechones blancos que te encienden
Lo envejeceré, para que bebamos juntos y brindamos por nuestro placer dejando caer el firmamento
como plumas para nuestros cuerpos.
Y después volamos.
12/ Mariposa
Como una mariposa cruda, en mi casa vuelo
De mi tiempo que transcurre en la cocina, corto una parte con el cuchillo para la poesía
detrás de la cortina
Nadie sabe que ahí estaba un poema se me ha derramado mientras lavo los platos
Y que un huracán de palabras me asaltó mientras cocinaba la ocra
A veces no encuentro ninguna explicación para este impulso que se apodera de mí
cuando estoy asando el pescado
Y como un péndulo se sucedían las sílabas con frecuencia en mi cabeza
– Yo las quiero así. – balanceándose e insistiendo-
para que no las revele el vapor del freír y el olor del polvo de limpieza
Puede que las envuelve en la toalla para que no las moje la humedad hasta que se enfríen
en la nevera
Muy pocas veces me apresuré a escribir mis sílabas surgidas en la cocina en la notas
de mi teléfono móvil.
Cuando termina mi día laboral doméstico, me miro en el espejo
palpo mis pestañas, mis ojos, mis labios y mis rosas
Luego, me embriago con mi plenitud blanda
El espectro de la poesía que me ha seducido cuando cocinaba se infiltraba por mi trenza
y se niega a salir
Lo recuerdo en vano, mi cabello ya cayó en el tazón de la sopa
que mi marido devoró con avidez y me dijo literalmente
Explícame por qué algunos alimentos parecen más sabrosos que otros
en algunas otras veces
Me hace un guiño malicioso con el ojo cerca del espejo
para sacar las estrofas de la poesía de mi cabello
estampándola con su música sobre mis labios.
¡Solo entonces se apresura la conclusión perfecta del poema!